Como el mejor futbolista argentino
Alfredo Häberli nació en la Argentina en 1964 y en 1977 emigró a Suiza con su familia. Allí se graduó con honores en Diseño Industrial en la Höhere Schule für Gestaltung de Zúrich, en 1991, y simultáneamente abrió su estudio de diseño. A lo largo de su carrera, en la que se sigue destacando, trabajó con grandes marcas —no solo creando objetos, sino en proyectos de diseño interior— como BMW, Camper, Georg Jensen, Iittala, Moroso y Kvadrat. También recibió numerosos premios y reconocimientos y en 2008 realizó la muestra retrospectiva “SurroundThings” en el Museum für Gestaltung de Zúrich.
Entre los últimos trabajos de su estudio, Alfredo Häberli Design Development (AHDD), sobresalen el sistema de mobiliario In-Out-Office para Andreu World, la línea Taba para Moroso y el rediseño de Rado DiaStar.
Antes de diseño industrial, estudió arquitectura. ¿Cómo fue el proceso de admisión a la carrera de diseño?
Cuando hice el examen de ingreso a la carrera de diseño industrial, de 250 jóvenes aspirantes, solo 12 estudiantes fueron seleccionados. Después de un examen de tres días, quedé en la ingrata decimotercera posición porque mi alemán no era lo suficientemente bueno. Así que durante un año fui a las conferencias de arquitectura en el ETH (Instituto Federal Suizo de Tecnología) como invitado y luego volví a intentar el examen de ingreso. La segunda vez aprobé, ¡pero mi alemán no era realmente mejor!
Alfredo Häberli
¿Cómo es su espacio de trabajo?
Ante todo, mi estudio es un taller de investigación y experimentación. Hay un sinfín de metros lineales de libros y revistas y muchísimos objetos encontrados y de diseño propio. Es como un gabinete de curiosidades y bien podría ser un laboratorio. Para mí, el estudio es el verdadero lugar al que me encanta volver de mis viajes de trabajo. Es donde desarrollo las ideas con mi pequeño equipo. Es un lugar tranquilo, que favorece la concentración, con vista al lago y una gran terraza. Cada miembro del estudio tiene un escritorio de trabajo de tres metros de largo y yo me siento en una mesa Carlo Mollino con vista a todo el estudio.
¿Cómo registra las ideas que le surgen, por ejemplo, caminando por la ciudad? ¿En un cuaderno de bocetos, en un dispositivo electrónico? Tengo una memoria visual extraordinaria y afirmo conocer cada página de cada libro que tengo. Cuando viajo, hago bocetos, tomo fotografías o apuntes y, sobre todo, observo. Ver: querer conscientemente ver algo diferente; algo diferente en lo mismo que vemos, para poder descubrir algo nuevo.
Alfredo Häberli
¿Cuáles son los pros y los contras de diseñar para grandes marcas?
Las grandes marcas surgen de su pasado, cuando comenzaron a convertirse en lo que hoy son: grandes o famosas. La mayoría de las veces, esto se basa en una persona y su pasión, visiones y sueños. La química especial de tal personalidad no se puede simplemente clonar, incluso si los seguidores llevan parte de su ADN. Cuando uno quiere trabajar para una empresa así, también hay muchos otros diseñadores que quieren hacerlo y puede haber momentos desagradables. Sin embargo, uno nunca debe renunciar al objetivo de trabajar para una empresa de este tipo. Por otra parte, todas las grandes marcas se vuelven poco atractivas cuando se pierden los valores y el respeto por las personas y la naturaleza; desafortunadamente, hay algunas empresas que solo son grandes en apariencia…
¿Cuáles son los diseños de su estudio que más le gustan? ¿Por qué?
No podría revisar 30 años de mi trabajo de diseño. A veces, un proyecto tiene importancia porque fue un gran avance en los medios; otras, porque fue económicamente exitoso, o porque fue la portada de una revista. Algunos diseños surgieron de lo más profundo de los corazones y otros parecían imposibles al comienzo. Los proyectos más importantes son probablemente los que estás desarrollando actualmente. ¡Necesitan tu atención y energía ahora!
Malvinas es el nombre de los cuencos de acero, Taba del sofá. ¿Qué otros diseños llevan un nombre argentino o tienen una inspiración o un vínculo estrecho con el país?
El cuenco se llama Malvinas porque consta de dos partes y la lámpara Falkland, de Bruno Munari, ya figuraba en el catálogo danés. En general, se utilizaron nombres de lugares para esta selección. En el caso de Taba, la inspiración orgánica formal provino de un antiguo juego argentino que se juega con huesos de vaca, que lleva el mismo nombre.
¿Ha vuelto a la Argentina? ¿Cuál es su vínculo profesional actual con el país?
Viajo a la Argentina regularmente; hoy más como destino de vacaciones para viajar con mi mujer, nuestros dos hijos y con mi madre. En el pasado, solía dar conferencias en las universidades de Córdoba o Buenos Aires.
¿Hay una impronta argentina o latina en sus diseños?
Probablemente no sea el diseño real lo que esté influenciado, sino la forma en que trato con mis socios comerciales y clientes.
¿Hay un diseño argentino o un diseño suizo? ¿O ya no se puede catalogar así?
Históricamente, los suizos siempre han tenido la necesidad de inventar cosas porque no tienen su propio acceso al mar y dependían del comercio. Entonces se vieron obligados a idear otras cosas propias, lo que todavía se nota hoy. En mi caso, la precisión y la racionalidad las aprendí de mis estudios en Suiza, pero la poesía, el sentimiento y lo indescriptible me los traje de la Argentina.
¿Cuál es el objeto que más le gusta diseñar? ¿Cuál presenta los mayores desafíos? ¿Hay alguno que ya se hayas «aburrido» de diseñar?
Es un material más que un objeto el que me gusta especialmente: la madera sigue siendo el material más inteligente. Podemos usarlo para construir de todo, desde embarcaciones hasta muebles, desde casas hasta aviones. Vuelve a crecer y es ecológico. También me gusta el alambre, y el vidrio tiene algo inexplicablemente inmaterial.
¿Hay algún objeto que aún no haya diseñado y quiera hacerlo?
Durante mucho tiempo acaricié el sueño de diseñar mi propio reloj. Este sueño ahora se ha cumplido con la edición del 60º aniversario del Rado DiaStar. Y mi nuevo sueño es el diseño de un velero.
Alfredo Häberli
¿Tiene materiales, colores y formas favoritos?
En cuanto a los materiales, la madera. Pero no tengo preferencias formales y me gusta moverme entre todos los matices desde lo orgánico hasta lo ortogonal. En primer lugar, busco un valor agregado o un toque especial en todo. El color es la primera decoración y siempre cambia.
¿Qué ofrecen los nuevos materiales, desarrollados con más tecnología? ¿Cómo imagina los próximos desarrollos?
La tecnología siempre ofrece la posibilidad de evolución, pero no siempre está disponible y uno tiene que ser inventivo de una manera diferente. Por ejemplo, en la búsqueda de nuevas tipologías o temas que se han pasado por alto, lo cual es simplemente posible gracias al uso de más capacidad intelectual. No creo que sea una buena estrategia incorporar simplemente más electrónica en todo.
En su página web dice que cree que los niños son más inteligentes de lo que pensamos y que los ve como «pequeños adultos». ¿Hay huellas del niño Alfredo en sus diseños actuales?
Los niños son altamente emocionales, poseen inteligencia intuitiva y sentimientos indescriptibles; cultivo mucho este lado de mí mismo.
¿Qué significan los premios y reconocimientos que ha recibido?
A menudo, estos premios significan más para las empresas que para mí. Es una forma de comunicación y de relaciones públicas indirectas. Los verdaderos premios para mí son las opiniones de algunos amigos que tienen el punto de referencia tan alto como yo.
¿Qué se siente al caminar por una ciudad y ver sus diseños en uso, por ejemplo, el banco El Poeta de Nueva York?
Esto es como recibir un Oscar o los premios reales mencionados anteriormente. Algún restaurante usa mis lentes o alguien compra mi sillón y no sabe que es mío. Un niño también quiere ser diseñador porque ha crecido con mi cubertería. Esto es como un Grammy, un Oscar, la Palma de Oro: ¡la verdadera alegría de vivir!
Dadas las características y alcance de sus diseños, ¿se siente un poco artista?
Siempre he visto la profesión de diseñador como si fuera un artista: con dedicación, pasión y constancia. No se publica nada que no me guste. Pero con la mayor soltura posible, como el mejor futbolista argentino. Sin embargo, los diseñadores tenemos más restricciones en términos de industria, tecnología, pruebas y estándares que un artista. Ahí es donde está el truco, en hacerlo bien. Lo que realmente siento es el profundo agradecimiento de haber concretado mi vocación como diseñador y poder ganar dinero con ello. Ese es el verdadero arte de vivir.
Alfredo Häberli
“Los proyectos más importantes son probablemente los que estás desarrollando actualmente. ¡Necesitan tu atención y energía ahora!”
Alfredo Häberli
“Si un niño quiere ser diseñador porque ha crecido con mi cubertería, eso para mí es como un Oscar”.
CRÉDITOS DE FOTOS: FOTOS HABERLI