Este arroyo, una vez sistematizado, se convierte en uno de los paseos icónicos de la ciudad, atravesando diversos barrios hasta llegar al centro y desembocando finalmente en el río Suquía.
Bóvedas para un umbrario
El terreno, de 25,45 metros por 59,00 metros, presenta un frente orientado al sur y una suave pendiente hacia el límite posterior, con orientación franca al norte y colindante con la cancha de golf del barrio. Esta configuración determinó decisiones tipológicas clave: el área social se ubica en el primer piso para aprovechar las vistas lejanas, mientras que la zona de dormitorios, el estar diario y los servicios se disponen en planta baja, en estrecha relación con el jardín.
Bóvedas para un umbrario 
Bóvedas para un umbrario
La planta baja actúa como un basamento murario que sostiene una estructura independiente en el primer piso, sobre la cual se eleva una cubierta abovedada dispuesta en cinco bandas paralelas que organizan todos los espacios de la casa. La separación entre los ejes de las bóvedas maximiza la ocupación de la superficie del terreno, respetando los retiros laterales establecidos por la normativa (con un ancho de banda de 3,45 metros y una longitud total de 15,50 metros). Este sistema configura un techo tipo “sombrilla” de espacialidad continua, que define áreas intermedias tanto en el frente sur como en el norte.
Bóvedas para un umbrario 
Bóvedas para un umbrario 
Bóvedas para un umbrario 
Bóvedas para un umbrario
El proyecto se estructura en torno a cinco bandas que definen el orden constructivo y la distribución programática de la vivienda, abarcando ambos niveles y estableciendo una modulación aplicable a todos los sistemas involucrados. Una de estas bandas traza el eje longitudinal del acceso, conectando los espacios de aproximación, ingreso y la posterior relación con el parque exterior.
El acceso principal se realiza a través de un espacio de doble altura, que ofrece vistas hacia el campo de golf. Aquí se emplaza la escalera que vincula las dos plantas y conduce hacia el parque y la zona de piscina. Esta disposición extiende la organización tipológica interior hacia la geometría de los espacios exteriores.
El proyecto se sostiene en dos operaciones principales: un podio murario que resuelve los vínculos, accesos y la adaptación a las pendientes del terreno; y una cubierta abovedada que se eleva sobre este basamento, funcionando como un umbrario. La cubierta, sustentada por una estructura independiente, genera espacios de transición y destaca por sus amplios voladizos en los frentes norte y sur.
La materialidad refleja esta dualidad: la planta baja está construida con muros de hormigón ciclópeo, otorgando peso y carácter al basamento, mientras que en la planta alta prevalece la transparencia, con el techo abovedado suspendido sobre una estructura independiente. Los muros laterales de hormigón garantizan la intimidad del área social, protegiéndola de posibles visuales desde las viviendas vecinas.
Bóvedas para un umbrario 
El proceso constructivo se revela en la materialidad desnuda de la casa, donde predominan la piedra y el hormigón, reservando el ladrillo visto para las bóvedas, lo que enfatiza la difusión de una luz suave y cálida en el espacio principal. Las instalaciones eléctricas, a modo de «fábrica», se disponen a la vista mediante cañerías galvanizadas, aportando flexibilidad para futuras adaptaciones.
Con el objetivo de despejar la cubierta abovedada de cualquier instalación, el tanque de agua se concibió como una pieza escultórica independiente, sin contacto con la estructura principal, que otorga escala y marca el ingreso a la vivienda.
En síntesis, esta casa es una expresión de la hibridación y los contrastes propios de las ciudades latinoamericanas, construida con técnicas arcaicas y universales, como los muros pesados y las bóvedas, y materializada con el saber artesanal de los constructores de la región. A pesar de (o tal vez gracias a) esta combinación, la casa aspira a responder con sobriedad a una arquitectura contemporánea, propia de su lugar y de su tiempo.
Ficha Técnica
- Casa R&C – B° La Cascada / Ciudad de Córdoba
- Proyecto: Arq. Cristián Nanzer / www.cristiannanzer.ar
- Dirección Técnica: Arq. Cristián Nanzer / Arq. Daniel Villani
- Colaboradores: Arqta. Lourdes Cuadro / Arq. Juan Dimuro
- Cálculo estructural: Ing. Edgar Morán
- Construcción: Estudio Nebreda & Villani – Arqta Adriana Nebreda / Arq. Daniel Villani
- Diseño del Paisaje: Estudio Paisaje Contemporáneo | IG: @paisajecontemporaneo
- Instalaciones Eléctricas: Gabriel Canelo
- Carpinterías: Empresa Anodal
- Año de ejecución: 2020 – 2023
- Fotografía obra finalizada: Gonzalo Viramonte
- Fotografía avance de obra: Juan Dimuro
Memoria del autor: Cristián Nanzer
