El estudio danés BIG volvió a sorprender, esta vez en suelo neoyorquino: “The Spiral” es un edificio de oficinas cuya cinta ascendente en forma de espiral vincula a sus 65 pisos entre sí a través de jardines escalonados y colgantes. Ubicado en la intersección entre el High Line y el Hudson Boulevard Park, busca extender el cordón verde de ambos a lo largo del rascacielos, generando así una consciencia sustentable y multiplicando el contacto con la naturaleza aún dentro del edificio. La estructura completamente acristalada ofrece vistas imponentes, luz natural constante y una sensación de libertad que favorece al clima laboral.