14 de febrero de 2019
Casa Decor vuelve al barrio que lo vio nacer, allá por 1992, y en donde se han celebrado 12 ediciones desde entonces. Tras siete años descubriendo otras zonas emblemáticas de Madrid, retorna al Barrio de Salamanca. En esta edición se presentan 55 espacios decorados, por interioristas, arquitectos, paisajistas y diseñadores, en colaboración con un centenar de firmas del sector del hábitat, lujo y estilo de vida.
En la edición N° 54, que se inició el 24 de enero y finalizará el 10 de marzo de 2019, se agregará una semana más de lo habitual, debido al éxito de la pasada edición, en donde se batió el récord de visitas (49.393). Por este motivo, Casa Decor decidió prolongar las fechas de la exposición para que el público pueda visitar la casa de manera espaciada y, así, mejorar la experiencia de su recorrido. De forma paralela, los profesionales y empresas podrán aumentar el retorno de sus proyectos y maximizar su participación durante más días.
EL EDIFICIO DE NÚÑEZ DE BALBOA 86
Construido en 1925, el edificio de la calle Núñez de Balboa 86 constituye un ejemplo de las imponentes viviendas que se realizaron en el Ensanche de Madrid hacia el este, proyectado por el arquitecto sevillano Carlos María de Castro, a partir de 1860. Dentro del Ensanche Salamanca, ya en el siglo XX, se desarrolló un sector hacia el norte, en las inmediaciones de las calles Ortega y Gasset y Juan Bravo, que estuvo configurado por palacetes, hoteles y viviendas señoriales construidos por la aristocracia y la nueva burguesía de antes de la Guerra Civil. A este desarrollo posterior pertenece el edificio de Núñez de Balboa 86.
La fachada, no obstante, muestra un estilo más vanguardista que las clásicas edificaciones decimonónicas, que se perpetuaron adentrado el siglo XX. Por los trazos rectos, cuarterones geométricos y ausencia de elementos ornamentales superfluos, podría decirse que se inspira en los preceptos de un racionalismo temprano. Llama la atención el uso del ladrillo como elemento decorativo en los paños verticales entre ventanales, la rejería de los balcones, sencilla pero trabajada, y la balaustrada de la planta baja, que se repite en las terrazas de la cuarta. Así mismo, es destacable el arco sobre la ventana del primer piso, con dos columnas a cada lado, que enmarca la entrada principal, y el uso de columnas adosadas, lisas y con capitel clásico, que flanquean las ventanas de la última planta, y que aportan cierta solemnidad neoclásica a la fachada.
El edificio cuenta, además, con dos terrazas de 58 y 74 m2, y un patio central, de 100 m2, que determina la disposición en L de las estancias y las dota de luz.
MUCHAS CASAS EN UNA SOLA
El edificio, de 2.250 m2, siempre tuvo un uso residencial muy singular: cada una de las cuatro plantas albergaba sólo una vivienda, de 370 m2, en la que se sucedían amplios vestíbulos, salas y antesalas, despachos, numerosos dormitorios, cuartos de baño, cocinas con office y zona de servicio. Tras los proyectos de interiorismo realizados, muchos de estos espacios mantuvieron su tipología; por ejemplo, las antiguas cocinas se convirtieron en nuevos espacios para cocinar, y los cuartos de baño, en estancias íntimas de relax… como si los espacios no quisieran renunciar a su función original, pero pidieran urgentemente una renovación total. De ahí que esta edición de Casa Decor consiga dar una vuelta de tuerca a las propuestas decorativas, que suman un punto más de realismo, sin perder un ápice de variedad y riqueza creativa. El visitante tendrá la sensación de que, dentro de la casa, coexisten muchas casas, de estilos y registros diferentes.
TENDENCIAS DECORATIVAS
Casa Decor es una plataforma que no pone límites a la imaginación: su fuerza y gran valor está en la creatividad que llevan a cabo los profesionales y las marcas. Esta libertad creativa ha dado como resultado una edición de gran riqueza y variedad estética.
Los proyectos van desde propuestas conceptuales, de imaginería visual y escénica, hasta ambientes de tal realismo ambiental, que hacen que el visitante se sienta en una vivienda real, y no dentro de una Exposición.
La variedad de registros se ve también reflejada en la selección de materiales y recursos estilísticos. Es posible detectar, sin embargo, algunas constantes estéticas que marcarán tendencia en 2019: las celosías se convierten en uno de los recursos más decorativos para vestir espacios; los papeles pintados, de profusos motivos botánicos, mantienen su liderazgo decorativo; la piedra, el mármol, las piezas porcelánicas y los tapices cerámicos y de mosaico crean dibujos dinámicos y coloristas en suelos y paredes; las molduras y los trabajos en escayola sorprenden por su riqueza artesanal; la palillería de madera se reinventa y vuelve a protagonizar espacios en su versión más moderna… En definitiva, se presentan espacios muy trabajados, de texturas ricas y elaboradas artesanalmente, que consiguen un gran impacto visual.
La paleta cromática que domina en esta edición viene marcada por el azul y el verde, salpicados con notas de color rosa y melocotón.
De forma paralela, la tecnología, cada vez más presente en los espacios domésticos, se adapta a todos los criterios estéticos. Su presencia se camufla en los electrodomésticos más vanguardistas y en los sistemas domóticos para el control de la iluminación, climatización, imagen y sonido, etc. En cuanto a los estilos, no hay imperativo alguno: todos tienen cabida, desde el maximalismo explosivo de color, hasta el shabby más logrado, pasando por líneas minimalistas y expresiones eclécticas. Cada espacio cuenta una historia, encierra un porqué, nace de una idea precisa y manifiesta una creatividad exacerbada. Esa es precisamente la quintaesencia de Casa Decor: creación en estado puro.