“Creemos que la energía fluye a través del movimiento de los usuarios en un espacio arquitectónico”, explica LEÓN HIGUERA. Y eso es lo que sucede, precisamente, en Casa Ojiva: una planta totalmente abierta que busca la libertad de movilidad y visibilidad de los usuarios. Lejos de la ciudad y cerca del centro emotivo del territorio, ofrece una escapada para repetir.

Casa Ojiva 
Casa Ojiva 
Casa Ojiva
Tradiciones arquitectónicas
Las dos hojas de la fachada están inspiradas en el arco ojiva de la arquitectura gótica: apuntan hacia el cielo, creando mayor altura en el interior y, a su vez, abriendo los vanos de las ventanas que rematan con la vista del barranco.
Muchos de los materiales curados para la construcción y ambientación de la casa pertenecen al mismo terreno: lajas, troncos, ramas y piedras que se exhiben en su estado físico natural, sin la intervención de pinturas o terminaciones. “Creemos que el material es bello a través de su imperfección”, explica el arquitecto.

Casa Ojiva 
Casa Ojiva 
Casa Ojiva 
Casa Ojiva
Como en casa
La vivienda fue equipada con baño y cocina completos, cama king size, dos sillones reposera, terraza con fogatero y un Jacuzzi en voladizo sobre las barrancas. Cada uno de los espacios en el interior tiene un remate que se vincula con las impactantes vistas que rodean la casa: un valle mezquital en el que viven plantas espinosas como nopales, biznagas y mezquite.

Casa Ojiva 
Casa Ojiva 
Casa Ojiva 
Casa Ojiva
Su rusticidad y fusión con el entorno natural acentúan con un lenguaje propio la elegancia y el lujo de Casa Ojiva. Tanto, que tiene un dress code pensado para mantener el equilibrio con la geografía: es necesario usar colores neutros que aseguren la armonía interior y exterior. Al llegar, los visitantes encontrarán dos batas negras creadas por el diseñador ALEX MEDINA, que buscó integrar el concepto de Casa Ojiva en estas prendas para usar durante la estadía. En un mundo cada vez más acelerado, cambiante y, a menudo, hostil, este refugio promete y cumple: sus huéspedes se sentirán en un lugar único, sagrado y a salvo.

Casa Ojiva 
Casa Ojiva
“Casa Ojiva nace como una reconexión entre el ser humano y la naturaleza, representado por un templo con arquitectura artesanal ubicado en la cima de un barranco, transmitiendo arte, diseño y exclusividad al usuario”.
CRÉDITOS
Imágenes cortesía de Ariadna Polo
www.casaojiva.com




















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