27 de septiembre de 2018
Lo interesante de participar en Casa FOA es que nos da la oportunidad como diseñadores de desarrollar nuestra libertad creativa. En esta puesta en escena, construimos una maqueta en tamaño real con el fin de inspirar a los espectadores y acercarlos a la impronta del Estudio Feller Herc. Nos atraía mucho la idea de darle al proyecto una dinámica de realidad. Por eso elegimos el Bar, porque probablemente sería el lugar más transitado de la feria.
Al principio no sabíamos que los 90 m2 que teníamos en mente contaban con una expansión exterior de más de 200 m2. Necesitábamos un estudio de arquitectura del paisaje y entonces apareció Folia.
Mientras nuestra relación se forjaba, iniciamos la búsqueda de sponsors y colaboradores que poco a poco se fueron sumando al proyecto, apoyándonos con sus materiales, su gente y su “know how” y agregando valor desde distintas órbitas. Ellos son los que garantizarían la viabilidad de la obra. Ahora si estaríamos en condiciones de dedicarnos al diseño y ejecución de los espacios 35 y 36 que conformarían el Bar de Trapiche. El proceso no ha sido fácil, pero nos ha hecho crecer y enriquecernos en lo profesional y en lo personal.
Definimos la idea de lo que nos gustaría mostrar y la bajamos a papel primero para después convertirla en planos, renders y bocetos que han ido mutando con el pasar del tiempo, adaptándose a la evolución del proyecto, a la disponibilidad de materiales o al presupuesto, tal como ocurre en la vida real.
Es así como nuestro prototipo de Bar empieza a emerger: una barra de Dekton haría juego con las mesas redondas cuyas tapas son del mismo material pero con terminaciones distintas. La piedra artificial de la barra contrasta muy bien con el granito brasileño que viste las mesas “Massa”. Como asientos, usamos las sillas “#40”, de terminaciones metalizadas y tapizadas con géneros.
Los muebles y los porcelanatos que envuelven la sala hacen honor a una versión contemporánea de la cocina que alguna vez ocupó el espacio. Es así como el interior del lugar se va definiendo a través de texturas y materiales: porcelanato, espuma, hierro, mármol, tela, madera, hay de todo.
Con respecto a la arquitectura exterior, diferentes patrones con caminos que acompañarían el recorrido del jardín aparecen y desaparecen casi diariamente en nuestros planos de Autocad, hasta que finalmente logramos hacer converger lo factible con lo imaginado. La construcción del deck fue fundamental para el desarrollo para ese camino exterior que tanto veníamos estudiando. Elegimos uno de PVC color gris que se pudiera ensamblar como si fuese una extensión del revestimiento.
De esta manera, el porcelanato asomaría desde interior resurgiendo en el jardín en forma de muro o de patio rectangular para encuadrar una pérgola que funciona como estación de encuentro. Bajo la pérgola se resguarda una gran barra de Dekton apoyada sobre una estructura de mesa “Tanga” y fabricada con materiales 100% aptos para exterior. Los decks generan líneas de circulación y conectan los espacios del jardín permitiendo su tránsito para contemplar la vegetación o acercarse a los livings. Varios de los juegos de exterior se emplazarían sobre un sustrato de piedra mar del plata.
El follaje enmarca la arquitectura y va generando una transición desde la sombra al sol, respetando la vegetación preexistente. El recorrido comienza con un bosque joven, donde arboles de diferentes tamaños conviven con arbustos y donde las ventanas se cubren de flores amarillas y de perfume. El paisajismo fue idea de Folia.
A medida que el sol avanza, el jardín se va transformando en una pradera donde mezclas de gramíneas y salvias, estas últimas producidas por Matías Busch, buscaran integrarse con la vieja enredadera que recubre las medianeras desde hace décadas y que tímidamente empezara a brotar anunciando la entrada de la primavera. Al final del camino descansan junto a un olivo, que también supo observar el pasar de los años en el convento, algunas piezas muy especiales en hormigón.
Cuando cae la noche las luces toman protagonismo. Para la fachada utilizamos la iluminación, en los caminos se instaló lámparas y las estacas, con la intención de generar un recorrido nocturno por el jardín. Finalmente, bajo la pérgola, iluminada por guirnaldas, los invitamos a finalizar la visita, brindando con una copa de vino. Salud!
Arquitectura – Estudio Feller Herc – www.estudiofellerherc.com
Arquitectura del Paisaje – Folia – www.folia.studio
Fuente: Estudio Feller Herc – www.estudiofellerherc.com
Imágenes cortesía de: Ana Grucki – www.anagrucki.com