Igualmente popular entre locales y turistas, el Mercado Mahane Yehuda de Jerusalén -también conocido como ‘El Shuk’-, nuclea a más de 250 vendedores de los más diversos rubros: frutas y verduras, vinos y licores, artículos para el hogar e indumentaria. Luego de cada jornada, el predio de la feria queda sembrado con envases, plásticos y recipientes de los distintos productos. NOA RICH, AVNER BALACHSAN, MAYA SHTRIGLER y YOHAY ALUSH, cuatro estudiantes de diseño industrial, encontraron en esos residuos el material de inspiración para un proyecto de su carrera: “Luego del proceso de brainstorming, muchas ideas y bocetos, nació esta colección de asientos, TACHTIT, que en hebreo significa fondo”.
Lo que no se ve en el mercado
Inspirado en el ritmo acelerado del Mercado, el cuarteto de estudiantes decidió tomar asiento y observar. Luego de una conferencia dictada por NOAM DOVER, debían presentar un proyecto que reflejara lo aprendido durante un taller de metales. En lugar de generar un producto de cero, decidieron recuperar y reutilizar los residuos generados luego de las ediciones de la feria, que al final de cada jornada se acumulaban en los containers de basura. Las partes posteriores de cada recipiente servirían como asientos para una estructura de tres y cuatros patas dependiendo del modelo, hechas en hierro plegado de 3 mm.
Una vez que recolectan los recipientes, RICH, BALACHSAN, SHTRIGLER y ALUSH lavan y cortan los plásticos en diferentes medidas dependiendo para qué tipo de asiento vaya a ser utilizado. Luego se confeccionan las patas con técnicas de láser, para ser plegadas y soldadas al cuerpo del asiento. “Uno de los desafíos del proyecto fue desarrollar un diseño atractivo capaz de ser resistente y duradero, que pudiera ser utilizado para el fin que fue pensado: sentarse”, BALACHSAN.
Una familia singular
La colección TACHTIT está integrada por cuatro modelos de asientos: una banqueta baja, dos bancos individuales y un taburete alto. “Queríamos crear una familia de taburetes con un carácter personal para cada modelo pero con un diseño uniforme que los atravesara a todos”, comenta RICH. Sus nombres en hebreo están vinculados al uso original que se le dio a cada uno de los plásticos: Zayt, que significa oliva, está hecho con los recipientes que se utilizan para guardar y transportar aceitunas, de color azul; Maim -agua-, lleva como asiento la parte inferior y transparente de un bidón de agua; Canolla, el recipiente amarillo para aceites y Malit, de color blanco, es el que se usa para conservar el puré de manzanas que se utiliza en pastelería.
El ejercicio realizado por este grupo de futuros diseñadores industriales fue ejemplar en varios sentidos. Por un lado, lograron resolver un problema vinculado a los residuos y su recolección; por otro, pusieron en marcha un sistema de reutilización con fines utilitario; por último, lograron resolver una pieza de diseño de manera sencilla y eficiente, incorporando un asiento de uso diario para distintos espacios.
Imágenes cortesía de Yohay Alush
FICHA TÉCNICA
Diseñadores: Noa Rich, Avner Balachsan, Maya Shtrigler, Yohay Alush
Proyecto: Tachtit Tools
Ubicación: Jersulén (Israel)
Materiales: Plásticos de recipientes
Fotografía: Yohay Alush
Año: 2015