25 de septiembre de 2017.
Desde 2004, las obras de MAD están entre las más impactantes y galardonadas del mundo: su inspiración futurista y oriental genera una combinación única entre diseño, tecnología, función y experiencia. MA YANSONG, su fundador, fue reconocido como una de las «10 Personas más Creativas en Arquitectura» por Fast Company en 2009, recibió la prestigiosa membresía International Fellowship otorgada por el Royal Institute of British Architects en 2011 y fue seleccionado como Young Global Leader en el World Economic Forum en 2014. El estudio es convocado por marcas, organizamos e inversores de todo el mundo para desarrollar proyectos urbanos, habitacionales, culturales y artísticos.
Receta oriental.
YANSONG se graduó del Instituto de Ingeniería y Arquitectura Civil de Pekín (en donde actualmente es docente) y tiene un master en Arquitectura de la Universidad Yale. La formación propia y la transmisión de conocimiento siempre fueron un compromiso en su carrera. Su filosofía sobre la arquitectura se sustenta en el concepto de diseño de Shanshui City: una visión de la ciudad del futuro basada en las necesidades espirituales y emocionales de sus habitantes. Así, los proyectos de MAD buscan generar un balance entre el espacio urbano, las necesidades de la humanidad y el cuidado del medio ambiente: “Nuestro objetivo es poner a los residentes de la ciudad en contacto con los elementos naturales y volver a despertar su apreciación por el entorno”, explica el arquitecto. En simultáneo a su práctica de diseño, el arquitecto descubrió un nuevo acercamiento al público, los valores de las ciudades y su profesión a través de exhibiciones, publicaciones y trabajos de arte.
Absolute Towers, las mellizas de Toronto.
El partido conceptual para este proyecto galardonado en 2006 comenzó con una pregunta: ¿qué mensaje debería transmitir la arquitectura? La ciudad canadiense de Mississauga buscaba una nueva identidad y desde MAD duplicaron su significado: a través de dos torres que los locales apodaron Marilyn Monroe, crearon punto de referencia dentro de ciudad, que conecta de manera emocional con los residentes. “En lugar de la lógica simple y funcional del modernismo, nuestro diseño expresa las múltiples y complejas necesidades de la sociedad contemporánea. El edificio es más que una máquina funcional: responde a su estatus como punto de referencia de manera elegante y actuando como una entrada a la ciudad. Es algo hermoso, escultural y humano”, cuentan desde el estudio. Los rascacielos tienen 50 y 56 pisos y una vista envolvente de 360º. Fueron premiados en 2012 como los mejores edificios altos de América.
Obras maestras.
Uno de los proyectos más celebrados de MAD es el Harbin Opera House en Harbin, China. El edificio fue inspirado en el espíritu indomable del desierto y el clima del norte de la ciudad: “Como esculpido por el viento y la arena, se mezcla con la naturaleza y la topografía. Lo imaginamos como un centro cultural del futuro: un lugar de encuentro que da cuerpo a la integración humana y artística mientras se mezcla de forma sinérgica con la naturaleza circundante», explica MA YANSONG. Con una acústica única a nivel mundial, el teatro fue moldeado para recrear la topografía de su entorno. En temporada baja, cuando la nieve lo cubre de un manto blanco, se convierte en un refugio, mientras que en las temporadas altas deja ver la textura de sus revestimientos, que simulan una erosión.
El Chaoyang Park Plaza, en Pekín, es una de las realizaciones del concepto Shanshui City. Su arquitectura introduce el paisaje natural en el centro de la ciudad a través de la morfología de lagos, bosques, arroyos y valles, sugeridas a lo largo y ancho de más de 120.000 m2 de edificios comerciales, de oficinas y residenciales. Las dos torres asimétricas están conectadas por un patio: los sonidos del agua corriendo hacen que el vestíbulo entero se sienta como el escenario de un valle de montaña. Debido al uso natural de la luz y el sistema de sistema de purificación de aire, la proyecto fue premiado con el certificado LEED por el U.S. Green Building Council.
Entre los proyectos más pequeños de MAD y el primero del estudio en Japón, se destaca la Clover House en Okazaki, un jardín de infantes de 134 m2 con casi la misma superficie de espacio verde. «Era importante que se sintiera como un hogar y que diera a los niños la mejor casa posible para crecer: una que promueva el aprendizaje y la creatividad. Queríamos crear una pieza de arquitectura juguetona, que quedara en la memoria de los niños”, explica YANSONG. Para reducir los costos, se recicló la estructura de madera pre-fabricada que tenía la casa, trabajando el nuevo diseño sobre la misma: el techo inclinado es el elemento que organiza todo el espacio, creando interiores dinámicos y permitiendo un acercamiento desde el punto de vista del niño a través de un edificio con forma de cueva mágica o fuerte.
Entre sus proyectos en construcción, uno de los más prometedores de MAD es el Xinhee Design Center, un edificio de más de 60.000 m2 que alojará las oficinas de seis empresas vinculadas a la industria de la moda: «Lo imaginamos como un edificio con piel y huesos. El punto en común entre la ropa y la arquitectura es que ambos exploran la relación entre el interior y el exterior”, argumenta YANSONG. La forma del edificio simula seis pétalos que crecen desde un punto central, cada uno exclusivo para las distintas marcas pero con la posibilidad de interactuar y comunicarse entre sí. Como todos los edificios diseñados por el estudio, tendrá una configuración inteligente para el uso sustentable de la luz y la energía.
Entre la cordura profesional y la locura creativa que los grandes talentos de la arquitectura, el diseño y el arte logran fusionar, la filosofía de trabajo de MA YANSONG se instala no sólo como una forma de hacer sino como un modo de reflexionar acerca de los espacios. En esa tarea monumental de crear edificios de gran escala y para grandes usos, logra imprimir un sentido de la naturaleza, el habitar y el intercambio que promete un futuro saludable tanto para las ciudades como para sus habitantes.
Imágenes cortesía de: MAD Architects – www.i-mad.com.