Restaurante «Velo»: unidos pero separados
Estudio Montevideo diseña un restaurante en Madrid pensado desde su origen para esta nueva etapa de distanciamiento físico.
En Madrid, una de las ciudades más afectadas por el Corona virus, es indispensable pensar como continuará la vida en todas sus amplitudes. Estudio Montevideo, conocido por su obra en proyectos gastronómicos, ha diseñado un restaurante pensado estratégicamente para cumplir los cuidados necesarios para disminuir los contagios durante las fases de desescalada. Un diseño expresivo que propone una nueva mirada en el disfrute de la experiencia gastronómica en los próximos meses de incertidumbres.
“Donde un sentido se apaga, los demás se agudizan” es la primera frase disparadora para diseñar los distintos aspectos del proyecto.
El diseño de “Restaurante Velo” consiste en cumplir el distanciamiento físico y las normas de higiene, pero también en brindar una nueva respuesta desde el diseño y los sentidos a la situación.
Han utilizado 3 conceptos principales para hacerlo.
-Sentidos incentivados
Unidos pero separados. Un “velo” de vidrio vertical amarillo cálido y translúcido atraviesa y divide todo el salón en dos partes. El velo dibuja y sectoriza todo el espacio logrando zonificación y ambientes controlados, pero también busca, al poder mirarnos y conectarnos, la sensación de estar juntos en el ambiente íntimo y juntos en el ambiente total. “Siempre habrá otra persona ahí” es la sensación buscada según Marco Ferrari, quien dirige Estudio Montevideo Madrid.
La música diseñada, el gusto y el aroma típico de la comida también son por supuesto protagonistas del emprendimiento. Es así como la falta de contacto será suplementada en un sentido lúdico por la atención de los otros sentidos humanos.
-Higiene
Inspirado en los Materiales higiénicos y lavables de un hospital. Se pensó desde el suelo hasta las sillas, con materiales fáciles de limpiar con texturas lisas. También abundan los tonos azules y blancos para expresar claridad y pureza.
-Funciones y tecnologías
Zonas seguras y controladas formadas por el dibujo del “Velo” amarillo, con un máximo de 12 personas por ambiente correctamente distanciadas. Mecanismos y tecnologías como la ventilación con ozono que sirve para limpiar el aire, puntos de higiene con agua, alcohol y geles de limpieza, zaguán de aseo como filtro exterior/interior. Puertas automáticas, grifos de pies en los baños. APP de servicio (turno, menú, pedido,etc) y robótica cooperativa.
El nombre del emprendimiento, “Restaurante Velo” fue inspirado por el origen de la palabra “Restaurant”, que significa, “restaurativo”, refiriéndose al nombre de una comida que se ofrecía en Francia en el siglo XVIII para restaurar las energías. Y justamente restaurarnos, reponernos, es lo que buscamos después de esta experiencia tan fuerte a nivel mundial dicen Ramiro Veiga, Gabriela Jagodnik y Marco Ferrari que se encuentran explorando este nuevo reto.
“Luego, cuando todo esto pase, dejamos caer el “Velo” y nos abrazamos otra vez.
Fuente: Estudio Montevideo