Erik Johansson en cuarentena
"Resetear el botón" que nos saque de esta situación y nos lleve a otro tiempo y lugar volviendo a la normalidad o una realidad diferente. ¿Lo haríamos? Sin lugar a dudas la respuesta es si. Hasta lo incierto es más tentador que enfrentarse a una pandemia con peligro de muerte muy cercana y muy real.
El fotógrafo sueco Erik Johansson refleja y deja registro de la pandemia en sus obras. Trabajando en confinamiento da sentido metafórico a sus fotografías del momento que estamos viviendo.
En esta fotografía representa la reacción colectiva ante una situación desesperada, donde muchas veces el resultado no es el esperado. Inspirado y fotografiado en las pequeñas carreteras rurales alrededor del área donde creció Erik en Suecia en julio de 2019. Filmamos 11 autos en el lugar y el resto de los que estaban más lejos fueron fotografiados por separado.
En esta escena representa un lugar que da la sensación de ser seguro y cómodo, «nuestra casa» que al vernos obligados a permanecer en ella sin opción de elegir poder salir, pasamos a tener la sensación de estar atrapados en una prisión. Esta fotografía fue tomada este verano a las afueras de Praga en una casa verde hecha a medida para adaptarse perfectamente al modelo.
En una entrevista con Estilo Propio «JOHANSSON sostiene que sus ideas fotográficas son surrealistas, pero que las produce de modo realista con un toque de humor. Y que su inspiración proviene más de pintores y artistas que de fotógrafos: cita a SALVADOR DALÍ, M. C. ESCHER, RENÉ MAGRITTE, SHAUN TAN y MATTIAS ADOLFSSON, entre otros».
Una mirada al pasado, representa nuestra actitud frente a una situación extrema que nos toca vivir. Tendemos a ver cosas más positivas en lo que está detrás de nosotros, recuerdos de cómo solían ser las cosas y valorarlas en el presente. Fotografiado en el mismo lugar en invierno y verano.
«Resetear el botón» que nos saque de esta situación y nos lleve a otro tiempo y lugar volviendo a la normalidad o una realidad diferente. ¿Lo haríamos? Sin lugar a dudas la respuesta es si. Hasta lo incierto es más tentador que enfrentarse a una pandemia con peligro de muerte tan cercana y tan real.
Autor: Erik Johansson